Antojitos y ANTOJOTES del embarazo

Algunas personas dicen que no existe cosa tal como los antojos de una embarazada. Hay mujeres que han pasado por todo su embarazo y reclaman no haber tenido algún tipo de antojo o cambio en su dieta. Ese no es mi caso y sé que tampoco el de muchas. Para mí los antojos es algo tan real como el mismo embarazo. Nunca se sabe cuando te van atacar, lo que sí se sabe es que cuando atacan darías cualquier cosa por satisfacerlo.

Pizza, chocolate, brócoli, mantecado, hamburguesa o comida mejicana son varios ejemplos de los antojitos que a las mujeres nos puede dar cuando estamos en gestación. Estos "antojitos" (como yo les llamo) suenan ricos y normales para cualquier persona. Uno no necesita estar embarazada o ser mujer para desear el saborearse un pedazo de pizza. ¿Pero qué pasa cuando lo que te apetece es una taza de vinagre? O comer hielo, tierra o simplemente ese pedazo de papaya a sabiendas de que la papaya nunca te ha gustado. Pero en tu embarazo si la deseas y cuando te la comes te sabe deliciosa. ¿No te ha pasado? ¡A mi si! Excepto lo de comer tierra, sin embargo conocí a alguien que si lo hacía. Esas cosas raras e inexplicables yo las llamo ANTOJOTES. No sólo por las cantidades que ingieres, también por la rareza del antojo. Tenía que estar bien embarazada para desear comerme las cosas que comí cuando estuve embarazada. Te cuento.

 Los antojos más raros los experimente en mi primer embarazo. El segundo fue más de comer la misma cosa por mucho, mucho tiempo. Cuando estaba embarazada de William tuve unos ANTOJOTES de comer algodón (Cotton Candy) que me comí tres de una sentada. What a Sugar Rush!!! Sobre cosas raras el ANTOJOTE fue de comer algo que cuando lo pienso no puedo evitar en sentir mal estomacal. Por favor prepárense para lo que van a leer, no es apto para estómagos sensibles. Ja,ja,ja. Era coditos con queso (macaroni and Cheese) mezclados con tuna con mayonesa y nuggets de pollo. ¡Sí, todo junto! Aún no me explico cómo podía comerlo, pero en ese entonces me sabía a la mejor comida del mundo. 

El embarazo es una hermosa etapa que para mí se mezcla con rarezas, incomodidades y dolores. Ja, ja,ja. Cuando te ataca el antojo, sea cual sea, es mejor saciar ese deseo antes de que alguien salga herido. Ja, ja, ja. El antojo ataca en cualquier lugar y a cualquier hora. Para mi embarazo de William hice a su papá (para ese tiempo era mi marido) ir en busca de alcapurrias a las 3:00 de la mañana. Por supuesto busco y busco sin encontrar. Al otro día mi ex-suegro me tenía 4 alcapurrias solo para mí. ¡¡¡Entonces fui feliz!!! :)

Para mi segundo embarazo no tuve ANTOJOTES de esos raros o exagerados. Las cosas que más me apetecían y en TOOOODO momento fueron mantecado, sopa de brócoli con ensalada, piraguas (rayados como se dice en Méjico) y comida mejicana. Lo cierto es que esta última aún no ha desaparecido. Parece que se quedo pegado a mí el deseo de comer comida mejicana al menos una vez en la semana.

Con mi segundo embarazo aprendí que cada embarazo es distinto. Lo que me salió de maravilla con el primer embarazo fue toda una pesadilla en el segundo y viceversa. Pero de esto les contare en otro post. Ahora prefiero saber de ti. ¿Estas esperando un bebé en estos momentos? ¿Has experimentado antojitos o ANTOJOTES? Cuéntanos sobre esas comidas que te causan placer y déjanos saber que rarezas has comido.

El próximo sábado les estaré dando mi punto de vista sobre el post que escribió David aquí. Personalmente lo encontré muy gracioso y conmovedor al recordar la gran paciencia que tuvo en mis peores momentos del embarazo. Ahora yo les contaré mi versión del asunto ya que no es fácil para nadie lidiar con las hormonas. Sé que muchas se sentirán identificadas.

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Besos,

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